Seguimos, como la semana pasada, con las películas nominadas para los Oscar, a tan solo unas semanitas de la entrega número ochenta y pico de los premios de la academia yanki de cine. En esta vuelta charlamos de Midnight in Paris, una bella muy bella película del siempre bello Woody Allen, y que si bien es una levantada dentro de las últimas películas del neurótico neoyorkino, tampoco es una genialidad absoluta.
Más delicia para los integrantes de SLD fue Los descendientes la última película de Alexander Payne (a quien tal vez recuerden por la muy buena Entre copas), con una digna actuación de George Clooney y la revelación de Shailene Woodley. Escena especialmente recomendada la de la pileta.
Por último, Moneyball, un nuevo logro de Aaron Sorkin por convertir lo infilmable en un guión de una película sumamente interesante. Para algunos pochoclera, para otros "una de baseball", las rápidas escenas de negociados y estadísticas en el mundo del baseball protagonizadas por Brad Pitt (cada vez más parecido a Robert Redford) y Jonah "Superbad" Hill.
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